Haz que tus tartas de queso con fresas sean portátiles envasándolas en tarros de mermelada, para luego disfrutarlas en un picnic de verano.
Preparación: 20 minutos
Sin cocción
Fácil
Rinde 8 unidades
Ingredientes
– 200 g de galleta de mantequilla (como el shortbread o los remolinos vieneses)
– 200 g de queso crema
– 200 ml de nata líquida
– 6 cucharadas de azúcar glas
– 2 cucharaditas de extracto de vainilla
– 500 g de fresas, cortadas por la mitad o en cuartos
Necesitará
– 8 tarros con tapa
Método
– PASO 1
Tritura las galletas en un procesador de alimentos o en un bol con la punta de un rodillo. Reparte las migas de galleta entre los tarros.
– PASO 2
En un cuenco grande, bate el queso crema, la nata, 5 cucharadas de azúcar glas y el extracto de vainilla hasta que estén suavemente batidos. Poner la mitad de las fresas y el azúcar restante en otro bol y aplastar con un tenedor hasta conseguir un puré. Pase el puré por la crema y repártalo en los tarros. Cubra cada tarta de queso con las fresas restantes, asegure las tapas y refrigere hasta que esté lista para ser envasada. Transpórtelo en una bolsa refrigerante.
¡Disfruta!
